Aunque más de 400 mil migrantes originarios de Hidalgo residen en Estados Unidos, se estima que solo un pequeño porcentaje regresará a su lugar de origen para celebrar las fiestas decembrinas. Entre las principales razones se encuentran la incertidumbre que ha crecido con la posible reelección de Donald Trump a la presidencia, lo que genera un ambiente de preocupación generalizada, no solo entre los migrantes mexicanos, sino también en otras comunidades.
Manuel Enrique Aranda, director general de Atención al Migrante en Hidalgo, comenta sobre el panorama: “Es una situación que afecta a muchos, no solo a los migrantes de México. Algunos de ellos tomarán la decisión de no regresar, pues prefieren no enfrentar la presión de vivir con esta incertidumbre.”
Familiares de los paisanos refieren a lo que perciben desde la distancia y lo que viven sus familiares en los Estados Unidos.
Por varios años decoran la casa familiar sin la presencia de sus cercanos, quienes emigraron a los Estados Unidos en busca de trabajo. Con tristeza, mencionan que la única forma de comunicarse es a través de llamadas telefónicas, esperando poder abrazarse nuevamente en un futuro cercano.
Varios hidalguenses no saben cuándo podrá reencontrarse, pero confían en que sus familiares podrían regresar a México en breve. Las inminentes deportaciones y redadas migrantes son un factor determinante en su decisión.
Según los registros de la Dirección de Atención al Migrante de Hidalgo, alrededor de 420 mil migrantes hidalguenses se encuentran en Estados Unidos. De estos, solo 15 mil tienen la posibilidad de regresar a México en este fin de año, ya que cuentan con documentos legales de residencia.
