En medio de la temporada de lluvias, el dengue se erige como una amenaza para la salud pública en diversas regiones del mundo, incluyendo Hidalgo. Sin embargo, frente a este desafío, la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH) ha desplegado una estrategia clave: la campaña «Lava, Tapa, Voltea y Elimina».
Esta iniciativa, en colaboración con la comunidad, busca mitigar la proliferación del mosquito Aedes aegypti, transmisor del dengue, Zika y Chikungunya, mediante cuatro acciones esenciales:
- Lavar con jabón y cepillo recipientes como cubetas, piletas y tinacos, eliminando así los huevecillos depositados en sus paredes.
- Tapar contenedores que puedan acumular agua, como tambos y cisternas, impidiendo que los mosquitos depositen nuevos huevos.
- Voltear objetos que puedan acumular agua y no estén en uso, como cubetas y macetas, evitando la proliferación de larvas de mosquitos.
- Eliminar cualquier objeto donde pueda acumularse agua, desde botellas hasta llantas, que ya no tenga uso.
La invitación se extiende a toda la población, especialmente en áreas endémicas, para aplicar estas medidas tanto en hogares como en espacios públicos y laborales. La efectividad de esta estrategia no solo reduce el riesgo de dengue, sino también de otras enfermedades transmitidas por vectores.
El dengue, aunque mayormente no mortal, puede desencadenar complicaciones graves si no se trata oportunamente. Factores como la densidad poblacional, almacenamiento de agua y desconocimiento acerca del virus contribuyen a su propagación.
Los criaderos de mosquitos, tanto naturales como artificiales, representan un peligro latente en cualquier espacio donde se acumule agua, desde recipientes hasta encharcamientos debidos a la topografía del terreno.
