El miércoles pasado, los habitantes de la zona metropolitana de Pachuca fueron testigos de un fenómeno celestial que dejó a más de uno maravillado. Se trató de la aparición de una impresionante nube iridiscente que adornó el firmamento de la Bella Airosa con una paleta de colores vibrantes y brillantes.
Las nubes iridiscentes, un evento meteorológico poco común pero absolutamente fascinante, se caracterizan por su inusual variedad cromática. A diferencia de las nubes convencionales, que suelen presentar tonos blancos o grises, estas muestran una amplia gama de colores que van desde el rosa hasta el azul, el verde e incluso el púrpura.
Este fenómeno tan llamativo tiene su origen en la refracción de la luz solar en los cristales de hielo presentes en las nubes. Cuando la luz se descompone en diferentes longitudes de onda al atravesar estos cristales, se genera el efecto iridiscente que tanto impresiona a quienes tienen la suerte de presenciarlo.
La aparición de esta nube iridiscente no pasó desapercibida en las redes sociales, donde numerosos usuarios compartieron sus fotografías captadas desde distintos puntos de Pachuca y municipios cercanos. Las imágenes compartidas en plataformas como Twitter, Facebook e Instagram testimonian la belleza y la rareza de este fenómeno natural, convirtiéndose en objeto de admiración y fascinación para quienes no tuvieron la oportunidad de presenciarlo en persona.
Sin duda, la nube iridiscente que tiñó el cielo de Pachuca ayer, se convirtió en un recordatorio de la sorprendente belleza que la naturaleza puede ofrecernos, invitándonos a maravillarnos y a apreciar los fenómenos meteorológicos que, aunque fugaces, nos regalan momentos de asombro y admiración.