En la Sierra Baja de Hidalgo, la localidad de Metztitlán enfrenta una situación desesperada debido a la sequía que ha dejado completamente seca la laguna que solía ser su fuente de vida y sustento. Con un año transcurrido desde que la laguna se secó por completo, los habitantes temen que su pueblo se convierta en un fantasma si las lluvias no llegan pronto para revitalizar el ecosistema.
Juan Flores Acosta, representante de los pescadores locales, expresó su preocupación ante la crítica situación, señalando que «las cosas van de mal en peor». Acosta relató que, aunque la laguna se había secado en años anteriores, solía recargarse rápidamente. Sin embargo, esta vez la falta de agua persiste de manera alarmante.
El Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua confirmó que la sequía en Metztitlán ha empeorado drásticamente en los últimos siete meses, pasando de ser «anormalmente seco» a alcanzar la categoría de «sequía excepcional», el nivel más alto de sequía registrado en la región. Esta escalada en la severidad de la sequía en un lapso tan corto es un fenómeno sin precedentes en la zona.
El impacto devastador de la sequía se refleja en la transformación de Metztitlán en un pueblo fantasma. Acosta mencionó el cierre de un restaurante que solía operar cerca de la laguna, el cual dependía de la venta de pescado producido en el área. Ahora, con la laguna seca, el establecimiento permanece inactivo, simbolizando el declive económico y social que aqueja a la comunidad.
La situación se agrava con la escasez de agua en los pozos, lo que augura tiempos aún más difíciles para Metztitlán. En este sentido, la pequeña comunidad de El Pirú, ubicada en la cuenca que alimenta la laguna, enfrenta desafíos similares. Residentes lamentan la falta de lluvias durante los últimos dos años, lo que ha impedido la cosecha en la región.
El éxodo de habitantes debido a las condiciones climáticas adversas es evidente en El Pirú, donde la población ha disminuido drásticamente de más de 240 personas a alrededor de 80. Algunos se vieron obligados a migrar a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades debido a la sequía y la falta de sustento en su lugar de origen.