En un operativo conjunto entre fuerzas federales y estatales, dos personas fueron detenidas y se aseguró un inmueble donde se encontraron armas, drogas y vehículos presuntamente involucrados en recientes asesinatos en el estado de Hidalgo.
Según el Gabinete de Seguridad, liderado por el secretario de Gobierno, Guillermo Olivares Reyna, se están investigando los recientes crímenes, que el funcionario describió como parte de «una rachita» de violencia. Desde el 13 de este mes, cuando se descubrió una fosa clandestina con seis cadáveres en San Agustín Tlaxiaca, ya suman 14 homicidios en la región.
El 12 de este mes, tres mujeres fueron halladas sin vida en Zempoala. Días después, el 16, se encontraron los cuerpos de tres hombres embolsados en la frontera entre Epazoyucan y Singuilucan, y el jueves pasado se localizaron dos hombres calcinados dentro de una camioneta.
El subsecretario de Seguridad, Salvador Cruz Neri, detalló que en el contexto de estas investigaciones, se realizó un cateo en Lomas de Portezuelo, Mineral de la Reforma, donde se detuvo a un individuo identificado como I.R.S., originario del Estado de México. En la operación se hallaron drogas, aunque no se precisaron detalles sobre la cantidad o tipo, además de una camioneta y un automóvil supuestamente utilizados en los levantamientos de las víctimas.
Dentro de los vehículos, las autoridades encontraron dos armas largas: un R15 calibre 2.23 y otra de calibre 5.56. Cruz Neri indicó que se localizaron pistas importantes, como la camioneta de una de las víctimas, M.G.E., alias “El Marino”. Este vehículo presentaba rastros de arena, similar a la hallada en el sitio donde fueron encontrados los cuerpos, lo que sugiere que los responsables utilizaron arena para ocultar los cuerpos y transportarlos hasta el lugar de su hallazgo.
En el operativo también fue arrestado un taxista, quien frecuentaba el domicilio cateado y ahora está bajo disposición del Ministerio Público.
Por su parte, Francisco Fernández Hasbún, encargado de la Procuraduría, señaló que M.G.E., alias «El Marino», estaba vinculado con la fosa clandestina encontrada en San Agustín Tlaxiaca. En este caso ya hay un detenido y se han girado varias órdenes de aprehensión.
Las autoridades confirmaron que todos estos casos están relacionados con actividades de narcomenudeo y robo de combustible, y aunque descartaron la presencia de cárteles en la región, señalaron que las células delictivas implicadas están compuestas en su mayoría por personas provenientes del Estado de México, Ciudad de México y Querétaro. Además, explicaron que los seis asesinatos en San Agustín Tlaxiaca ocurrieron tras un intento fallido de acuerdo entre dos grupos delictivos locales.